¿Usas lentes de contacto?
Tanto si te las pones de forma habitual como esporádica, queremos darte una
serie de consejos para velar por tu salud ocular. ¿Sabías que un uso indebido
de las lentillas puede provocar daños a corto o largo plazo? Las cicatrices, la
visión reducida o la ceguera son alguna de estas consecuencias, así que, para
evitarlos, vamos a ayudarte a cuidar los
ojos con estos consejos.
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Ojo y lentilla |
No duermas con lentillas
A pesar de que algunos fabricantes defienden que dormir con lentes de contacto es seguro, todos los estudios apuntan a lo
contrario porque se produce sequedad
ocular y un menor flujo de oxígeno.
Por ese motivo, las principales infecciones oculares se producen cuando los
usuarios duermen con lentillas. Una prueba evidente es que después de un sueño
las lentes de contacto se quedan pegadas a la córnea.
Sequedad
Existen algunas lentillas hechas a base de hidrogel de silicona, que permiten utilizarlas cómodamente y
durante más horas. En cualquier caso, es recomendable no abusar. No las
utilices durante demasiadas horas y,
cuando te molesten, quítatelas o refresca el ojo con suero fisiológico.
Revisión ocular
Te recomendamos que realices al menos una revisión ocular cada año, sobre todo si eres de los que utilizan las lentillas
con relativa frecuencia. Además, es más recomendable que dichas revisiones las
realicen oftalmólogos y optometristas, en lugar de ópticos,
porque pueden realizarlas más a fondo. En ese periodo de tiempo, quizá hayan
cambiado las necesidades de tus ojos:
bien la graduación, la esfera, la amplitud o la curva base. Y, por tanto, habría
que utilizar unas lentes con características diferentes.
Respetar la duración
Las lentillas suelen tener una duración determinada que se indica en la propia caja, bien diaria, quincenal, mensual o
anual. Es muy importante respetar esos plazos porque, en el caso de que se
superen, su calidad se verá ampliamente reducida. Asimismo, las lentes de
contacto pueden acumular bacterias o
abrasar la córnea.
Limpiar las lentillas
Hay que limpiar y conservar las lentillas de forma
adecuada. Para ello utiliza una solución
estéril y recomendada por expertos, nunca con agua del grifo. Además, el estuche debe estar limpio y se
recomienda cambiarlo cada mes o mes y medio para evitar acumulación de
bacterias. Cuando tengas las lentillas puestas, el estuche debe estar vacío y
debes rellenarlo con la solución justo antes de guardarlas de nuevo.
Indicios de infección
Si tienes cualquier indicio de sufrir una infección, dolor, enrojecimiento ocular, visión borrosa o sensibilidad lumínica, los oftalmólogos advierten de que no se
deben ignorar sus síntomas. En ese caso, quítale las lentillas lo antes posible
para dejar respirar mejor al ojo y,
si las molestias persisten tras 24 horas, acude a un experto.
COPYRIGHT © RUBÉN S.
Foto Por Cortesía: Clipart
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El cuidado de los ojos debería ser un hábito normal, especialmente si utilizamos lentillas. Hay muchas formas de prevenir la salud de nuestros ojos, como una alimentación rica en vitaminas A,C y E, protegernos del sol, hidratar los ojos para evitar la sequedad ocular... Todo lo que sirva para prevenir siempre es bienvenido.
ResponderEliminarBuen comentario. Gracias
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